Importancia del aislamiento de las tuberías
En el siguiente post vamos a hablar sobre la importancia de un buen aislamiento en tuberías y cañerías, las canaletas que ofrecemos en DasCreativa se encargan de ello, y vamos a explicarte los beneficios del uso de las mismas en tu fachada.
Un buen aislamiento de la tubería, empezando por el mantenimiento de la instalación, hace que a nivel de estado, su durabilidad sea mayor, debido a la menor corrosión, condensación y posibles desperfectos que se pueden generar en las tuberías, la humedad también es un factor importante en el estado de la red de cañerías, esto es clave para evitar la posible pérdida o fugas de agua en las tuberías, lo cual puede causar un grave problema, sobre todo en tuberías y circuitos de cañerías que se encuentran en las fachadas, ya que están más expuestas a los agentes externos, y no detectar una fuga, puede aumentar nuestra factura de agua/gas, esta misma puede ser la que nos pueda hacer saber la posibilidad de tener una posible fuga, la cual es evitable con una buena protección, las fugas de gas son las verdaderamente importantes. Una fuga de gas es un posible problema que se presenta en los hogares por los que encontramos tuberías de gas natural,también pueden producirse problemas de fugas de butano, aunque son menos recurrentes.
Beneficios de una correcta protección:
La protección de una tubería puede ofrecer una serie de beneficios, tanto en términos de seguridad como de durabilidad. Aquí hay algunos beneficios clave:
• Prevención de daños: La protección adecuada de una tubería ayuda a prevenir daños y reduce el riesgo de fugas o roturas. Puede proteger la tubería contra impactos, corrosión, vibraciones, cambios de temperatura y otros factores que podrían comprometer su integridad estructural.
• Mayor durabilidad: La protección de la tubería puede extender su vida útil al proporcionar una capa adicional de resistencia y protección. Esto es especialmente importante en entornos agresivos o corrosivos, donde la protección adecuada puede prevenir el deterioro prematuro y mantener la funcionalidad de la tubería durante más tiempo.
• Ahorro de costes: Al prevenir daños y fugas, la protección de la tubería ayuda a evitar costosos trabajos de reparación y reemplazo. Además, puede contribuir a una mayor eficiencia energética al evitar pérdidas de calor o de fluidos, lo que se traduce en ahorros en los costos de operación.
• Seguridad: La protección de la tubería puede mejorar la seguridad al reducir el riesgo de fugas de sustancias peligrosas o inflamables. Esto es especialmente relevante en industrias como la química, el petróleo y el gas, donde la integridad de la tubería es crucial para evitar accidentes graves.
• Cumplimiento normativo: En muchos casos, hay regulaciones y estándares específicos que requieren la protección de ciertos tipos de tuberías. Al garantizar la protección adecuada, se asegura el cumplimiento de las normativas y se evitan posibles sanciones o problemas legales.
• Mantenimiento más fácil: La protección de la tubería también puede facilitar las tareas de mantenimiento. Por ejemplo, los revestimientos protectores pueden permitir un acceso más sencillo a la tubería para realizar inspecciones y reparaciones.
En resumen, la protección de una tubería ofrece beneficios en términos de prevención de daños, durabilidad, ahorro de costos, seguridad, cumplimiento normativo y facilitación del mantenimiento. Al invertir en la protección adecuada, se puede garantizar un funcionamiento confiable y seguro de las tuberías a largo plazo.
Frío/Calor y como afectan a las Tuberías
Contamos con canaletas con termo-protección interna de aluminio-aluminio que mantiene una correcta temperatura de la misma, resiste a las bajas temperaturas en invierno, y al duro calor del verano, esto mejora el funcionamiento y mantiene un buen estado de la tubería y su contenido,evita posibles congelaciones en invierno, reducción del flujo, contracción y expansión de la misma,corrosión acelerada, problemas en sistemas de calefacción, y en verano, también evita el desgaste, dilatación, deformación, pérdida de eficiencia o riesgo de incendio son varios de los riesgos que sufren las tuberías en las distintas épocas de frío y calor.